Tras cuatro etapas y 667 kilómetros finaliza 17º en la primera carrera que ha abierto la temporada.
No cabe duda que la participación del ciclista sexitano Carlos Rodríguez Cano en el Tour de la Provence ha sido la mejor tarjeta de presentación al ciclismo mundial en el inicio de su segunda temporada como profesional en la fila del equipo INEOS.
Estamos seguros que no se olvidará fácilmente la exhibición de fuerza que hizo el ciclista almuñequero en la tercera etapa de este tour con el ascenso al Mont Ventoux que le llevó a sus jefes de filas a realizar doblete con victoria, en el caso de Iván Ramiro Sosa y el segundo puesto de Egan Bernal, amén del liderato como equipo.
Rodríguez Cano fue el encargado de incrementar el ritmo en el ascenso y por tano realizar la criba en el pelotón para poner en bandeja a sus jefes de filas. Una desmembrado el pelotón de los mejores. El ritmo del almuñequero hizo que la etapa se marcara una media superior a los 37 kilómetros por hora.
La cuarta etapa la ganaba el alemán Phil Bauhaus que fue el más rápido en la meta tras algo más de 163 kilómetros, desde Avignon hasta Salon-de-Provence. El corredor del Bahrain Victorious daba tiempo a un numerosísimo pelotón en el que entraba el sexitano en el (49º), tras controlar toda la ruta para evitar sorpresas.
Ha sido emocionante y espectacular ver como la prensa especializada, corredores y ciclismo han “descubierto” un gran corredor que muchos aún no conocían “al joven español” que formaba parte del equipo más importante del mundo como es el INEOS
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