Descubren muros romanos durante las obras de renovación de redes de agua y saneamiento en la calle Morería Alta de Almuñécar.
Aparecen muros romanos en la calle Morería Alta de Almuñécar , en pleno casco antiguo declarado como conjunto histórico, durante las obras que se están llevando a cabo para renovar las conducciones de agua y de saneamiento público en la citada calle del Barrio de San Miguel, según han informado la arqueóloga municipal, Elena Navas.
Navas que sigue el día a día de los trabajos, ha manifestado que en el transcurso de las mismas, se han podido documentar dos muros, “elaborados con piedra del lugar y empleando la técnica de construcción típica de época romana, que encontramos en otros puntos de Almuñécar; son muy parecidos a los que se encontraron el año pasado en las obras de la Calle San Joaquín”, indica.
“Uno de ellos lleva adosado un suelo de cal. Es muy emocionante recoger multitud de fragmentos de cerámica de esa época, pertenecientes a la vajilla de lujo, con decoraciones tan bonitas y los sellos de los alfareros que las hicieron; pero sobre todo es impresionante recuperar trozos de las ollas de cocina, las pesas de los telares, las tapaderas pequeñas, incluso los restos de las ostras que comían. Todos estos objetos nos están hablando del día a día de las personas que vivieron aquí hace 2000 años”, explica la arqueóloga municipal de Almuñécar.
Según Navas, las casas actuales están utilizando estos muros de cimentación que montan sobre ellos, porque constituyen una base muy sólida. “Están afectados por la apertura de zanjas abiertas para la red de saneamiento pública y abastecimiento de agua, aún así, son muros muy fuertes y bien construidos, que nos dan información muy importante de cómo se organizaba la ciudad romana y de cómo se extendía por debajo de las calles y las casas actuales, de una forma muy diferente a la actual”, señala la arqueóloga.
Para Elena Navas, la ciudad antigua se conserva debajo de la que ahora conocemos, “por eso es tan importante realizar estudios arqueológicos en todas las obras que se hagan en ciudades con un pasado tan antiguo e importante como el de Almuñécar. Es la forma, añade, en que los arqueólogos tenemos de mirar al pasado a través de pequeñas ventanas en la tierra”.
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