El primero se falla este sábado y el mes próximo se conocerá el siguiente
El proyecto “Biolast of Us” del profesor David Porcel Martín, docente de la asignatura de Biología y Geología y jefe de Estudios en el IES Al-Ándalus de Almuñécar, ha sido seleccionado como finalista en dos de los certámenes de innovación docente más importantes del país: en el Premio Espiral Internacional, que reconoce las experiencias educativas más destacadas en el ámbito de la innovación y la personalización del aprendizaje, y en los “Premios a la Innovación Educativa” que organiza Simo Educación, dentro de la categoría de mejor experiencia de gamificación, según ha informado el director del IES Al Andalus, Javier Morales.
“Hay personas y organizaciones que se dedican a apoyar, favorecer y promocionar este tipo de proyectos de innovación que apuestan por el alumnado como verdadero protagonista del proceso de enseñanza-aprendizaje. Es por esto, que el proyecto “Biolast of Us” ha alcanzado cotas muy altas en su parte final de desarrollo, recibiendo la fantástica noticia de haber sido seleccionado como finalista en los citados premios”, según han destacado desde el IES Al Andalus de Almuñécar
La celebración, selección y entrega de premios a los finalistas para el Premio Espiral tendrá lugar el próximo sábado 19 de octubre, a partir de las 10:30, siendo además emitido en streaming en el siguiente enlace: https://youtube.com/live/X–R54o8ye8?feature=shar
La celebración, selección y entrega de los premios a los finalistas de las Experiencias de Buenas Prácticas Educativas en el Salón Internacional de Tecnología e Innovación Educativa, tendrá lugar la tarde-noche del día 20 de noviembre durante la celebración de SIMO EDUCACIÓN 2024.
Hay que señalar que Porcel Martín ya ha llevado a cabo otras propuestas. En este sentido, recuerda que “primero fue “La gran aventura épica” con Classcraft, después llegó “GeoStranger Things”, y en el curso académico 2023/2024, ha llegado “Biolast of Us”, una adaptación del famoso videojuego y serie de televisión que tantos fans ha conseguido en todo el mundo”.
Depuse de explicarnos el contenido de “Biolast of Us” el profesor David Porcel Martín manifiesta que “ha sido una experiencia memorable e inolvidable tanto para el alumnado como para el profesor. Afrontar el conocimiento de los contenidos de una asignatura como Biología de una forma en la que el alumnado es absoluto protagonista de lo que va a vivir y de las decisiones que va a tomar, gestionando todas las emociones y conflictos que ello conlleva, es algo a lo que no están acostumbrados en su aprendizaje y que les dejará una huella profunda, tanto a nivel emocional como a nivel cognitivo”.
Algunos de los ejemplos que atestiguan las opiniones del alumnado sobre lo vivido son los siguientes:¿Y si les das la oportunidad de decir con una sola palabra lo que ha significado para ellos la experiencia? Pues este docente se la dio, y se expresaron así: Para entender en profundidad toda la extensión de este proyecto, se ha diseñado una web con toda la información sobre el mismo, que se puede consultar en este enlace (https://sites.google.com/view/biolastofus?usp=sharing).
Algunas de las fotos que resumen esta maravillosa experiencia, se muestran a continuación: ¿Que si merece la pena ni tan siquiera plantearse este tipo de proyectos para tu práctica profesional? Hace ya un tiempo en la vida profesional de este profesor que esta pregunta se responde con argumentos tan sólidos como los comentarios tanto a nivel físico como a nivel digital que el alumnado le hace llegar. La sensación de vivir cada día como un día nuevo en el que puede pasar casi cualquier cosa es algo a lo que debería aspirar cualquier docente. Cuando te levantas un día sí y otro también con unas ganas tremendas de ir a tu centro de trabajo para ver a tus chavales, contarles y que te cuenten, es que algo muy positivo está pasando.
Este cambio de mentalidad y de manera de afrontar esta profesión tan maravillosa, acompañado de un cambio en la metodología de aprendizaje de su alumnado, está suponiendo una metamorfosis radical en su manera de ver las cosas, haciendo que, más que una manera de trabajar, sea una forma y estilo de vida para este docente.
De nuevo, ante la cuestión, ¿merece la pena la gamificación con lo a gusto y confortable que se está en el rinconcito de las metodologías tradicionales donde tú hablas y transmites, ellos escuchan y asimilan, donde tú enseñas y ellos no aprenden, donde tú impones y ellos obedecen, donde tú elaboras y ellos no crean, y un sinfín más de “donde tú”?
Para cualquier persona que ame esta profesión y que la entienda profundamente, la respuesta es evidente. El mundo necesita más docentes que se aventuren a tirarse por el barranco de la incertidumbre sin miedo a lo que habrá allí abajo. Porque es verdad que puede haber un suelo lleno de rocas en el que te estrelles, pero también puede que haya un océano infinito de posibilidades y de personas que amortigüen tu valiente salto
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