La víctima facilitó una descripción detallada tanto de la vestimenta como de las características físicas del autor, lo que facilitó su localización
Los agentes se coordinaron de manera eficaz para detener al presunto autor
La Guardia Civil en colaboración con la Policía Local de Almuñécar han detenido a un varón de veinticuatro años de edad como presunto autor de un delito de robo con violencia e intimidación a un hombre de ochenta y un años de edad.
Los hechos ocurrieron el pasado domingo por la mañana. La víctima se encontraba sentada en un banco de la localidad de Almuñécar y tenía bajo la pierna un bolso portafolios con documentación y 600 euros en efectivo repartidos en dos sobres. Sin darse cuenta, un varón se le acercó por detrás con la intención de quitarle el bolso y tras un forcejeo entre ambos, finalmente se produjo el robo.
La Guardia Civil y la Policía Local tuvieron conocimiento de los hechos instantes después de que ocurrieran, por lo que ambos cuerpos policiales coordinaron un dispositivo de búsqueda por la zona de huida. Además, un agente de la Guardia Civil se dirigió a entrevistarse con la víctima a fin de que le facilitase una descripción lo más exacta posible del autor.
Poco tiempo después, con la descripción e información facilitada tanto por la víctima como por testigos de lo sucedido, Policía Local dio aviso a la Guardia Civil de que habían localizado a una persona cuyas características físicas coincidían. Tras ser reconocido sin ningún género de dudas por la víctima, los agentes comprobaron que el ahora detenido portaba dinero en efectivo del que no podía justificar la procedencia y cuya cantidad, así como la distribución de los billetes se correspondía exactamente con la que había en uno de los sobres sustraídos.
La Guardia Civil rastreó la zona donde se localizó al presunto autor y los agentes localizaron el bolso portafolios en cuyo interior se encontraba la documentación del denunciante, así como el otro sobre con el resto del dinero. Como se ha indicado, la víctima llevaba el dinero dividido en dos sobres, uno de ellos escondido entre la documentación, lo que impidió que el ladrón se percatase de su presencia, motivo por el que se desprendió del portafolios al creer que se había llevado todo el botín.
La Guardia Civil procedió a su detención como presunto autor de un delito de robo con violencia y todo lo sustraído fue recuperado y devuelto a su propietario.
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