Estuvo acompañado en el escenario por el pianista Luis Rodríguez Salva.
Bajo el nombre de “Fuegos artificiales para violín” el violinista gerundense, Miguel Muñiz, ofreció anoche un emotivo y bello concierto lleno de contrastes musicales acompañado al piano por Luis Rodríguez Salva
Muñiz, invitado por Juventudes Musicales de Almuñécar, comenzó su actuación interpretando las “Seis danzas rumanas”, de Bartók, para seguir con “El amor brujo”, de Manuel de Falla. Al finalizar esta obra llegó el momento más emotivo del concierto ya que Miguel Muñiz tuvo una dedicatoria especial a su abuela que había fallecido el día anterior y no pudo asistir al sepelio. Para este homenaje eligió una obra de un compositor catalán. El público asistente le brindó una gran ovación antes y después de la interpretación. El concierto siguió con su programación prevista con obras de Debussy, Joan Manén o Maurice Ravel, entre otros. Ya una vez finalizado y ante los aplausos del público, interpretaron una obra de Falla, como regalo y broche a la actuación.
Este fue el primero de los dos conciertos que, con apoyo de la Concejalía de Cultura, programa Juventudes Musicales de Almuñécar para este mes de noviembre. El próximo tendrá lugar el próximo día 22, a las 20 horas, y estará a cargo del Trío Schönes Lieder, formado por una pianista, trompetista y voz