Las cuatro jornadas se celebraron con el aforo completo y acondicionado por y para la ocasión siguiendo protocolos sanitarios y con el mejor elenco posible de artistas españoles.
Javier Colina fue el homenajeado recibiendo la medalla de la ciudad de manos de la alcaldesa, Trinidad Herrera, e incluyendo su nombre en el “Bulevard del Jazz” del Parque El Majuelo
En un año difícil, casi imposible para la música en directo con continuas suspensiones, el Festival de Almuñécar ha mantenido su programación con una edición especial, reducida en días y dedicada solidariamente a la música española. Cumpliendo con las normativas de los protocolos sanitarios de la Junta, Jazz en la Costa ha sido el único Festival de Jazz que se ha podido realizar este verano en nuestra Comunidad. Un esfuerzo de adaptación que llevó a la Organización a plantear tres programas diferentes en función de las cambiantes situaciones sanitarias.
El evento musical, organizado por el Ayuntamiento de Almuñécar y la Diputación de Granada se ha saldado con éxito a pesar de las circunstancias especiales.
Más allá de organizadores y artistas, los protagonistas auténticos de esta trigésimo tercera edición han sido los espectadores. El público recibió esta edición con un entusiasmo tan excepcional que ha rozado la militancia: los abonos agotaron en tres días y en apenas una semana se acabó el billetaje disponible. En deferencia a los aficionados que no llegaron a tiempo, la organización ha previsto diariamente unas pocas decenas de localidades añadidas siempre dentro de las preceptivas obligaciones sanitarias.
El director del Festival, Jesús Villalba, ha agradecido a los espectadores “su ejemplar y respetuoso comportamiento en esta situación tan complicada que vivimos, manteniendo las distancias y evitando acercamientos innecesarios, así como usando las mascarillas durante todo el desarrollo de los conciertos durante horas”.
Para esta edición distinta se han hecho conciertos en parejas cada noche en vez de la actuación única, trasnoches y actividades de calle; así se han contratado al doble de profesionales en esa colaboración de la Organización con nuestro mundo de la cultura musical. Los propios artistas han expresado su agradecimiento a la iniciativa y sobre todo, también, al público por su entrega. En algunos casos eran los primeros conciertos que daban tras el confinamiento, por lo que algunos de ellos calificaron de “muy emotiva” su presencia en el escenario del parque “El Majuelo”.
En estos cuatro días se ha tenido una panorámica muy interesante del alto nivel del jazz español en este momento. Nombres de varias generaciones han coincidido en el Festival, donde se ha evidenciado que protagonistas de las primeras promociones como el veterano Horacio Fumero se pueden dar la mano en escena con jovencísimos talentos como Andreas Motis. El programa ha ofrecido las actuaciones del grupo Costa, Chicuelo & Mezquida, M.A.P., Lucía Rey, Chano Domínguez Trío, Javier Colina Quartet, Pepa Niebla Renaissance Group y el quinteto de Andrea Motis.
Villalba destaca también la progresiva proyección de Jazz en la Costa, cuyo éxito se debe al apoyo de un público incondicional y a un equipo humano de trabajo muy profesional de más de 30 personas y a la notable difusión que tiene en Europa y a nivel internacional, debido al escenario privilegiado donde se celebran los conciertos, además de la programación, que ha seguido manteniendo como seña de identidad y una impronta eminentemente jazzística, en este caso “Made in Spain”.