Una cerrada ovación de compañeros, amigos y familiares a la salida del coche fúnebre del pórtico de la Iglesia de la Encarnación de Almuñécar ha sido la despedida final del bombero sexitano fallecido este jueves, Francisco Eduardo Ruiz Morales, tras una larga enfermedad.
Esta mañana cientos de personas llenaron la iglesia para acompañarle en la despedida. En la homilía el sacerdote ha manifestado que a Paco “hay que darle las gracias por todo el bien que hizo su vida”. Y estaba en lo cierto, porque fue una persona y un profesional que siempre estuvo dispuesto a ayudar a los demás.
Antes de la misa, los compañeros bomberos quisieron rendirle otro homenaje profesional llevando el féretro al Parque de Bomberos de Almuñécar del que se sentía orgulloso. Allí hicieron sonar las sirenas de los vehículos en su honor. Fueron momentos de emoción y lágrimas por el compañero en la despedida; después continuaron a hombros hasta la iglesia.
Paco Ruiz Morales, como todos le conocíamos, pertenecía al Cuerpo de Bombero de Motril y contaba con la Cruz de la Constancia en su categoría de oro por sus méritos y su bondad.
Este viernes todos los compañeros de Motril y Almuñécar acudieron a despedirlo como él se merecía. Descansa en Paz, Paco.
Dejar una contestacion